Chef Rogelio Albusac: cada día su mejor versión

¿Cómo resumes tu vida profesional?

Mi vida profesional comenzó casi por accidente, después de varios fracasos escolares. Afortunadamente, mi madre me dijo: Roge, a ti que siempre te ha gustado la cocina ¿Por qué no estudias eso? Y a partir de ahí hubo un antes y un después. Mi vida profesional ha pasado por muchos momentos y localizaciones diferentes, y todas ellas me han aportado convirtiéndome en lo que soy hoy día como profesional y ser humano. Hotelería en la costa de Huelva, luego en el restaurante y cafetería del Corte Inglés, luego Gastrobar, buffet de primera línea de playa y campo de golf en la costa Onubense. Después pasé por la enseñanza en Colombia y por la dirección de cocina en un restaurante de lujo y 500 puestos en el mismo país. Para terminar siendo jefe de cocina del único estrella Michelin de Huelva durante 3 años y medio.

¿Qué ingredientes no pueden faltarte?

Pufff!! Qué pregunta más compleja! ¡Cuántas respuestas te puedo dar! Jejeje. Pues si hablamos de especias, te diría que por capricho y por gusto, el azafrán, por uso en todas las comidas, la pimienta negra. Si hablamos de hierbas frescas, el tomillo sin duda. Y si hablamos de algún producto proteico, el cerdo ibérico que no me falte, que para eso soy de Huelva, jejeje. Aparte de todo esto, el vino blanco es importantísimo en mi cocina. Pero como puedes ver, no tengo un ingrediente que pudiéramos decir que es sello de identidad en mi cocina.

¿Cuál es tu plato estrella?

Pues creo que ninguno, no hay ninguna elaboración por la que la gente o mi familia me busque, no soy reconocido por ningún plato. Pero si hay un plato al que le tengo mucho cariño, y aunque siendo “sencillo” y del recetario tradicional, fue un plato que aprendí cuando cursaba el superior de restauración en Sevilla y me enseñó el mejor profesor de cocina que he tenido nunca: Enrique Cano. El plato es un milhojas de calabacín con brandada de bacalao y emulsión de tomate. Sencillo, pero delicioso y muy especial en mi memoria.

¿Qué te trae al nuevo proyecto con Nexejob?

Hay una cosa que he aprendido desde chico, mi padre me lo inculcó con su ejemplo y su trabajo diario, y es el no ser conformista, el no estancarse, evolucionar y buscar cada día ser tu mejor versión. Y esto es lo que ha hecho que dé el salto, que busque algo más. Y para hacer esto, tengo que buscar a los profesionales que me pueden ayudar y dirigir en ese salto evolutivo, por lo que desde entonces formo parte de la familia Nexejob, donde me han acogido con los brazos abiertos  y en todo momento han estado pendientes de mí y mi familia para que estemos bien y tranquilos. ¡Y aprovecho para dar las gracias y mil gracias más a Anitée y a Nexejob!